Tanto los vuelos en avión como las inmersiones de buceo implican variaciones bruscas de presión que pueden tener efectos inesperados en la boca.
Estos cambios afectan especialmente a cavidades de aire como los senos paranasales y los oídos, pero también pueden influir en los dientes, especialmente si hay caries, empastes filtrados, coronas mal ajustadas o infecciones sin tratar.
Este fenómeno, conocido como barodontalgia, puede generar un dolor repentino e intenso durante el despegue, el aterrizaje o la inmersión.
Aunque no es una patología frecuente, sí es relevante en pacientes con trabajos o aficiones vinculados a los cambios de altitud o presión.
¿Qué es la barodontalgia?
La barodontalgia es un dolor dental inducido por los cambios de presión ambiental. Se produce cuando el aire atrapado en una cavidad dental o bajo una obturación se expande o se contrae con el cambio de altitud o profundidad, provocando molestias agudas.
Aunque puede afectar a cualquier persona, es más común en:
- Tripulantes de cabina o pilotos
- Buceadores (profesionales o recreativos)
- Personas que realizan vuelos frecuentes
- Pacientes con restauraciones antiguas o no revisadas
En muchos casos, este dolor indica la presencia de una lesión no diagnosticada, como una caries profunda, una fisura radicular o un tratamiento mal sellado.
¿Qué revisa el dentista antes de volar o bucear?
Una revisión odontológica preventiva incluye:
- Exploración clínica completa: para detectar caries incipientes, fisuras o filtraciones en empastes y coronas.
- Evaluación radiográfica: permite ver lesiones que no son visibles a simple vista, como infecciones, quistes o caries interproximales.
- Chequeo de tratamientos previos: como endodoncias, obturaciones o prótesis. Cualquier filtración o mala adaptación puede generar presión interna.
- Valoración periodontal: ya que una encía inflamada o una infección no tratada puede empeorar con la presión.
- Consejos personalizados: especialmente si se van a realizar inmersiones prolongadas o vuelos de larga duración.
¿Cuándo debería hacerse esta revisión?
Lo ideal es planificar una revisión dental al menos 2 semanas antes del vuelo o del inicio de la actividad de buceo, para tener tiempo de realizar cualquier tratamiento necesario sin urgencias.
Se recomienda especialmente si:
- Llevas tiempo sin acudir al dentista
- Te has realizado empastes, coronas o tratamientos de conductos recientemente
- Vas a realizar un vuelo largo o hacer varias inmersiones
- Has sentido molestias al volar anteriormente
Cuida tu sonrisa también cuando viajas
La boca no está aislada del resto del cuerpo, y es especialmente sensible a los cambios de presión cuando existe una patología sin tratar. Realizar una revisión general antes de volar o bucear no solo mejora tu salud bucodental, sino que puede evitar complicaciones que arruinen una experiencia tan especial como un viaje.
En DentalQuality® solo encontrarás clínicas con odontólogos que priorizan la prevención y el trato personalizado.
Si vas a viajar próximamente o tienes una escapada de buceo planeada, no dudes en acudir a una clínica certificada con el Sello de Calidad DentalQuality® para una revisión completa y segura.