La boca, con sus dientes y encías, constituye una parte del cuerpo humano que está en continuo contacto con el exterior. Es la puerta de entrada de los alimentos y de todas las bacterias que les acompañan.
Se trata de una zona húmeda donde las bacterias deben pasar, pero no quedarse. Es por eso que es tan impotante apostar por una boca sana.La boca es sumamente vulnerable, por lo que el porcentaje de personas que no padecen algún tipo de problema en sus dientes o encías, en algún momento de su vida, es muy reducido.
Prevención, la mejor manera de lucir una boca sana
Prevención significa tomar una serie de medidas con la finalidad de evitar problemas futuros. Por tanto, el mejor tratamiento de toda enfermedad es la prevención. Antiguamente, y hasta no hace muchos años, se pensaba que con la vejez era natural perder la dentadura.
Pero ahora sabemos que esto no es cierto siempre que se sigan algunos pasos sencillos que permitan mantener dientes y encías sanas, además de visitar periódicamente al dentista.
Por ello es tan importante la prevención, dado que al actuar sobre las causas responsables de este proceso, estamos verdaderamente evitando una enfermedad, no simplemente corrigiendo los efectos.
Principales amenazas
Los dientes se pierden fundamentalmente por dos causas: la caries y la enfermedad periodontal, normalmente conocida como piorrea. Ambos casos están causados por las bacterias y afectan a un número elevado de la población. La caries es básicamente un agujero que se hace en un diente y que, a medida que se extiende, la destruye.
La piorrea es una enfermedad de las encías que consiste en la pérdida del hueso que sujeta los dientes. De manera que éstos se van quedando descarnados, se empiezan a mover y finalmente se caen.
Como en los dos casos la placa bacteriana es directamente responsable de la enfermedad, parece lógico que nos planteemos la manera de eliminar esta placa para que no se produzcan estos problemas. Y no es tan sencillo como parece, ya que la placa se comporta como el polvo en las casas, es decir, se introduce por todos los rincones.
La prevención de estas dos enfermedades es, por tanto, importantísima. De ahí que hacerse revisiones odontológicas y seguir unas pautas de educación dental es crucial para tener una boca sana.
Es importante que para realizar una buena prevención, realices revisiones periódicas con tu dentista de confianza.